jueves, 1 de diciembre de 2011

"LA FIGURA DEL ENTRENADOR AYUDANTE I" (Por Javier Álvarez)

Quería compartir con vosotros este articulo sobre el entrenador ayudante, donde Javier Álvarez, describe su experiencia y plasma lo difícil y duro del trabajo de un buen entrenador ayudante.

CARACTERÍSTICAS Y DEFINICIÓN .


Respeto/ Humildad.
Fidelidad.
Saber convivir con la ausencia de protagonismo.
Gestión de la opinión; saber escuchar/ saber cuando hablar.

Gestión de la experiencia.

Iniciativa.

Responsabilidad.

Mutación de funciones en relación al primer entrenador.

Relación con el primer entrenador. Gestión psicológica.

Relación con el resto de cuerpo técnico.

Relación con los jugadores.

El buen ayudante aprende/ aporta.

1.¿Qué es ser entrenador ayudante? Es una meta, un reto o un punto de paso.




Entiendo que el entrenador ayudante o 2º entrenador, términos que en ocasiones pueden parecer un poco ambiguos/ difusos y que, particularmente, no sé cual escoger, es un entrenador de baloncesto. No hay un curso de entrenador ayudante. Es un título que no existe y quizá sea el único que no se pueda estudiar. Los entrenadores ayudantes son entrenadores de baloncesto.

Explico esto porque el aficionado de a pie, que no conozca el mundo profesional, es muy posible que no tenga un conocimiento real de la labor del 2º entrenador. Intuye cosas pero no las sabe. Ellos ven a una persona de traje en los partidos que anda por ahí y que de vez en cuando habla con el entrenador principal. A nivel profesional es tan difícil ser un buen ayudante como un buen primer entrenador y el hecho de que tengas cierto nivel en uno de los dos puestos no significa que puedas desempeñar con soltura el otro (buenos ayudantes que no tienen buena carrera como entrenadores principales y al contrario aunque ese caso es más difícil).

El hecho de que estos entrenadores no ejerzan la máxima responsabilidad en un equipo (hablamos a nivel general no sólo a nivel profesional) obedece a diferentes factores; falta de experiencia, quizá falta de capacidad, falta de oportunidades, etc.

Tradicionalmente el hecho de ser entrenador ayudante ha sido utilizado como un paso previo, bajo mi punto de vista necesario, para posteriormente ser primer entrenador. Pero en otras ocasiones nos encontramos con personas, entre las que me incluyo, para las que el hecho de ser entrenador ayudante es un reto en sí tan valido como cualquier otro. A esta percepción ayuda el hecho de la revalorización de ese puesto. Es una meta desde la que crecer a nivel individual para ayudar a crecer al grupo (equipo/ club).

Entiendo que cuando a una persona le proponen ser entrenador ayudante debe saber exactamente por qué y para qué quiere aceptar o no ese puesto. Normalmente este tipo de situaciones se dan al inicio de tu carrera. Si lo usa como un paso previo para ser primer entrenador, si lo que quiere es aprender y formarse ya que carece de experiencia y más adelante tomar una decisión sobre su futuro, si lo que quiere es simplemente ayudar a la enseñanza de este deporte sin ningún ánimo o si realmente quiere ser un entrenador ayudante de cierto nivel.





2.Evolución de la figura del entrenador ayudante.



La evolución de la figura del entrenador ayudante ha cambiado/ variado mucho durante los últimos años. Antiguamente el ayudante era la persona que hacía mucho trabajo sucio dentro del equipo; veía no se cuantos videos, hacía el scout, pitaba en los entrenamientos, etc. Yo, por ejemplo, cuando llegué a Menorca en primer año tenía que hacer las funciones de ayudante y de delegado porque no había más presupuesto.

Uno de los apartados donde se ha visto mejor reflejada la evolución del mundo del baloncesto es en el cuerpo técnico y los medios sobre los que se apoya su trabajo (uso de las nuevas tecnologías, entrada de la figura de un tercer entrenador, etc.). De igual manera todo aquello que se refiere a las infraestructuras deportivas sobre las que asienta un club han cambiado (figura del director deportivo, scouters, responsables de cantera, etc.).En definitiva ha habido un aumento de la profesionalización.

Esta evolución deportiva, que rodea a lo que es el propio equipo de baloncesto (jugadores), ha provocado una cierta especialización y como consecuencia de ello un aumento de la calidad de trabajo. El nivel de profesionalismo de los integrantes de un cuerpo técnico de alto nivel es cada vez más alto. Hay mejores profesionales. No todo el mundo sirve. En este sentido la NBA va un paso por delante de nosotros.

También hay que darse cuenta de la evolución que ha tenido el puesto de primer entrenador en los últimos años. Un aspecto que yo considero clave en este sentido y alejándonos de profundizar en la evolución del puesto de primer entrenador es que se ha ampliado el radio de acción de los entrenadores. En estos momentos tienen que ser capaces de controlar una serie de variables que no son sólo el propio trabajo en pista. Me refiero a los medios de comunicación, a los responsables de la materia deportiva dentro de un club, a la relación con el entorno (afición), etc.

Este tipo de condicionantes han generado un mayor peso específico del entrenador ayudante a la hora del propio trabajo de baloncesto y han aumentado su nivel de responsabilidades. El primer entrenador es necesario que sepa delegar pero también debe saber en quien. En el fondo lo que quiero transmitir es que para ser entrenador ayudante no sirve cualquiera sino que necesitas una persona con la suficiente capacidad, conocimientos y ética de trabajo que cubre las posibles deficiencias que el primer entrenador pueda tener durante la temporada.

Esta especialización de la que antes hablaba y que provoca el aumento de la calidad ha derivado que en la actualidad haya un mercado nuevo que es el mercado de ayudantes. Aquellos que lleven más tiempo en el mundo de baloncesto o que conozcan la evolución de este deporte recordarán que hace años el entrenador ayudante era el hombre de la casa, que además entrena a equipos inferiores y que no cuesta mucho dinero al club. Los clubes que siguen pensando de esta manera y que de una u otra forma desprecian la labor del entrenador ayudante tienen, bajo mi punto de vista, un problema que solucionar. Esto no significa que esa persona de la casa pueda ser tremendamente válida para ese puesto. Ojo. Pero aquellos que no se han alejado de la evolución y que han estado al tanto de los cambios en este sentido son los más interesados en contar con los mejores profesionales porque son conscientes de la importancia que dentro de un equipo profesional ha adquirido este puesto.